Ya no es ningún secreto que el contenido atrae tráfico a la web. Y seguramente que no digo nada nuevo respecto que un buen contenido de calidad y bien enfocado atrae tráfico de calidad. Y este último es precisamente hacia el cual una página web y su blog se debería enfocar. Menos ruido y más resultados.
El SEO sigue siendo importante, pero antes de ponernos a optimizar me gustaría plantear un ejercicio sobre la calidad de contenido que se escribe en un blog.
Conocer el público objetivo
Todavía hay negocios con páginas web que no se plantean este ejercicio. Crear un perfil de tu cliente ideal, conocerlo e identificar sus necesidades debería ser uno de los objetivos principales. Aquí el sentido común, el conocimiento del negocio, la competencia y la herramienta de Google analytics son nuestros aliados principales.
Sin sentido, sin datos y sin conocimientos estamos jugando a adivinanzas. Puede ser divertido, pero seguirá siendo un juego.
Conocer las palabras clave
Conocer las palabras clave, los volúmenes de búsqueda y las dificultades de posicionar es un ejercicio imprescindible. Es un trabajo que se está haciendo tanto para el robot del buscador como para el usuario final, y al final, las cantidades y números te revelan las palabras más utilizadas.
Escribir el artículo
Ahora bien, una vez teniendo claro a quién nos dirigimos y con qué palabras clave, viene lo más importante: escribir. Y no quiero hablar sobre la redacción, quiero hablar sobre el valor de lo que se escribe en un blog. Una vez hecho el trabajo un poco más técnico, me gustaría centrarme en el que debería ser el objetivo principal de cada artículo del blog. Y eso es ofrecer contenido de valor y mover emociones.
Disponemos del tiempo que disponemos y por eso el lector se plantea mucho si el contenido del blog que ofreces vale la pena ser leído. Para que valga la pena hacer el click en el enlace, tiene que ser una inversión y no una pérdida de tiempo. Para conseguir que tu artículo sea una inversión lo ideal es centrarse en las siguientes opciones.
- Educar
Por alguna razón triunfan los artículos tipo: “Cómo hacer, Cómo aprender, Cómo conseguir”. Son temáticas necesarias y bien explicadas con conocimientos, apelan a la curiosidad y necesidad del lector. Este tipo de artículos son muy buenos también para SEO ya que cubren la intención de búsqueda informacional.
- Ayudar
Si alguien lee tu artículo del blog sobre cómo conseguiste algo es porque quiere cierta información, quizás está pasando por algo parecido y necesita ayuda en esta temática. En otras palabras, el lector quiere mejorar su vida a través de tu experiencia.
- Entretener
Las emociones son las que mueven el mundo y en el mundo de los blogs el equivalente a ellas serían las palabras. La gente quiere pasarlo bien y quiere sentir cosas. La opción de evadirse y de vivir otras experiencias a través de tus palabras puede dar buenos resultados.
- Inspirar
Podría ser un subtema dentro de entretener, pero igualmente lo pongo aparte. Ponerse a explicar una historia desde un punto de vista más personal y dar esperanza a otras personas puede ser un buen motivo de lectura de tus artículos del blog.
Estos cuatro son elementos que ayudan publicar contenidos para un artículo del blog que la gente quiera leer. Apelar a la curiosidad, a la esperanza, al conocimiento y mover las emociones son ingredientes que siempre funcionan. Y por eso antes de apretar el botón de publicar, pregúntate: ¿Ayudo, informo, entretengo o inspiro? Si tu respuesta es sí por lo menos a una de las preguntas, ya sabes que el artículo escrito para tu blog aporta valor.
- No olvides decorar tu artículo con un título atractivo y no hablo de clickbait.
- Una imagen que sea llamativa pero coherente con el artículo y sea acorde también con la apariencia de todo el blog.
- Adapta tu artículo de blog para SEO.
- Organiza tu contenido para que sea fácil de leer.
- Usa más la palabra “tú” y menos o casi nada la palabra “yo”
¡Ah! y publica, ya que la mayoría de éxitos en cualquier materia dependen solamente de atreverse.
Cuéntame en los comentarios lo que te ha ido bien, lo que no y qué otras cosas te han funcionado a ti.
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